Bracli lo ha comprobado y os propone una forma muy divertida y estimulante de localizarlo.
Gracias a un collar especial acabado en un anillo de perlas, los tangas y bodies de algunas colecciones de Bracli (descúbrelos aquí), son capaces de estimular de forma simultánea las partes sensibles externas y el punto G.
- El primer paso a seguir es deshacer el lazo que une el anillo de perlas con el encaje. De esta forma, el collar de perlas se libera (sólo queda sujeto a la parte frontal de la prenda).
- Debes hacer un nudo al final del collar de perlas para formar un racimo.
- Este racimo se introducirá en la vagina con la ayuda de uno o más dedos.
- Una vez ha sido introducido, existen dos posibilidades:
- Masturbación: Con uno o más dedos, debes deslizar el collar de perlas a lo largo de la vagina, alcanzando el punto G con el racimo y estimulando el clítoris con la parte exterior del collar.
- Penetración: Igual que en el caso anterior, pero sustituyendo los dedos por el pene.