Bracli es una marca de lencería de alta gama que nace en 1996 con la creación de un producto original, diferente a todos los conocidos hasta ese momento: el tanga de perlas. Se trata de la primera prenda íntima femenina con efectos de estimulación sexual.
Debido a su carácter innovador, el tanga de perlas Bracli es concebido como una invención y es registrado a través de una patente internacional que lo protege de posibles imitaciones. Por un lado es una elegante prenda de lencería y por otro es un juguete sexual, reconocido como tal por el The Kinsey Institute for Research in Sex, Gender, and Reproduction de la Universidad de Indiana, en Estados Unidos y que además forma parte de los archivos de los Museos de Erotismo de París, Berlín, Ámsterdam y Barcelona.
La clave para alcanzar esta estimulación está en el suave pero efectivo masaje que produce el roce de un collar de perlas que se ha situado en las partes más sensibles de la mujer: todo ocurre de una forma muy sutil y agradable donde, como en la música, los tempos pasan de un ritmo “tranquillo”a “afettuoso” hasta el “allegro”…. Estas vivencias no harán más que acumular unos recuerdos satisfactorios que invitarán a nuevas aventuras, nuevas historias en un constante preludio de sensaciones…
En una época en la que la sexualidad era un tabú, con productos eróticos sólo presentes en el mercado en oscuros y clandestinos sex shops, el tanga de perlas Bracli logra hacerse un hueco en las más prestigiosas tiendas de lencería tradicional tales como la icónica La Petite Coquette en Nueva York. Firmas influyentes y conocidas mundialmente como Victoria’s Secret comercializaron el tanga de perlas a lo largo de todo Estados Unidos a través de sus tiendas y modelos como Adriana Lima y Alessandra Ambrossio lucieron esta prenda en sus catálogos. El tanga de perlas Bracli rompía entonces las barreras existentes entre ropa íntima y juguetes eróticos y lograba unir ambos mundos de forma sutil y elegante. Nacía así un nuevo concepto de prenda, que ya no sólo tenía la funcionalidad de vestir sino también de agradar.
El diseño único del tanga de perlas Bracli une dos elementos atractivos y tentadores: joyería y lencería. Se combinan así dos mundos exclusivos, lujo e intimidad, dando lugar a una fórmula perfecta para la seducción. Pero Bracli va un paso más allá y añade, además, un elemento nuevo y mágico a la fórmula: la imaginación. Esto es que el tanga de perlas nos provoca fantasías, nos hace imaginar unas experiencias placenteras que son el verdadero poder estimulante de esta nueva prenda íntima: ¡Bracli invita a imaginar!
El juego se inicia en secreto, un secreto íntimo que puede ser compartido, en el que todos los intervinientes participarán de lo excitante de esta agradable experiencia. El placer tiene su máxima expresión cuando se transmite, cuando trasciende de una persona a otra.
Esta creación aporta un elemento ilusionante que abre las expectativas placenteras a todas las actividades, cotidianas o no, de la mujer. Así, un paseo por las calles, una jornada de compras, una charla con los amigos, un viaje, conducir, subir escaleras, una cena romántica, tu trabajo cotidiano…. todo es diferente si se hace llevando un tanga de perlas Bracli en tu intimidad.
Con el paso del tiempo, Bracli evoluciona como marca de lencería añadiendo nuevos productos y diseños. Ya no sólo ofrece el tanga de perlas sino que también aparecen en su catálogo sujetadores, bodies, picardías y complementos dando lugar a distintas colecciones elaboradas con variados materiales de las más altas calidades: encajes de Calais, bordados, sedas, tules transparentes… Pero Bracli no se queda ahí y presenta nuevas formas de estimulación ofreciendo para ello diferentes tipos de collares con distintas finalidades placenteras: desde la estimulación compartida en pareja hasta la búsqueda del punto G femenino. Bracli siempre aspira a explorar el placer en todos los sentidos.
Los productos de Bracli se elaboran de forma artesanal en talleres situados en España donde se cuidan todos los pequeños detalles: desde el diseño y la minuciosa selección de los materiales (todos procedentes de fábricas europeas) hasta la confección y el empaquetado. Las perlas son fabricadas siguiendo el método artesanal mundialmente conocido creado en el municipio de Manacor, Islas Baleares. Todo está pensado para que las personas que reciban una prenda Bracli disfruten de una experiencia placentera. Así, cada una de los productos se presenta con un cuidado packaging para que cada detalle evidencie que tenemos ante nosotros un “regalo” un objeto cuya finalidad, primera y final, es AGRADAR. Si hay una buena definición para la palabra “regalo”, Bracli la cumple en todas sus acepciones: es el regalo que te harán, el que tu harás y el que te harás a ti mismo/a.
Los guionistas de la serie “Sexo en Nueva York” vieron este potencial de “exclusivo regalo” en Bracli cuando lo eligieron para que fuera la sorpresa que un millonario le regala a Samantha en su jet privado con una intención evidente: él sería partícipe de ese regalo, compartiría con su amante esa agradable experiencia que ya se había iniciado cuando descubrió que las perlas sirven para algo más que para ser admiradas…
Gracias a su aparición en esta famosa serie de, el tanga de perlas Bracli consiguió darse a conocer en todo el mundo, apareciendo años más tarde en otra serie internacional de prestigio, Anatomía de Grey, siendo en esta ocasión el regalo elegido para una novia en su fiesta de despedida de soltera. Nuevamente, un tanga de perlas se convertía en el regalo perfecto para una ocasión especial.
Bracli ya es la marca que no sólo representa la primicia del tanga de perlas, sino que es el nombre que la moda íntima asocia al diseño original que une lencería y joyería. Las perlas son el elemento distintivo de esta marca, hemos descubierto la sutileza de su uso y proponemos siempre la ilusión satisfactoria con sus diseños.
Bracli te invita a hacer volar tu imaginación, ¿Te atreves a experimentar nuevas sensaciones con ayuda de nuestras perlas?
